No quiero perder. No quiero perderme. No quiero perderte.

miércoles, 18 de abril de 2012

Mi rutina.

Todos los días la misma rutina. Me levanto, enciendo el ordenador, como, voy a clase, vuelvo, meriendo, veo la tv, enciendo el ordenador, tuenti, twitter, tumblr, blog, prácticas de universidad, ceno,p tc, tuenti, tumblr, twitter, dormir. Y así se me pasan las horas, los días y los meses.. A veces puienso qué coño estoy haciendo con mi vida, siento que no la aprovecho una mierda y en vez de intentar cambiarlo, me quedo quieta, sin hacer nada. Esperando a que llegue el siguiente día para volver a hacer lo mismo que el anterior. Pero hay algo que me motiva, hay algo que me hace querer levantare cada mañana y querer seguir en este jodido mundo que nos ha tocado vivir. Y eres tú. El chico alto y flacucho, el que me mira, sonríe y me quiña el ojo con descaro, el que consigue ponerme nerviosa y me hace soltar un "idiota" con una sonrisa porque no sé qué decir, el malote de turno y el buenazo a escondidas. El más guapo entre los guapos, pero el más diicil también. El que va de tipo duro pero luego se vende por unos mimos. Tú eres la razón por la que me levanto y por las que otras no me quiero despetar. Que soñándote también se está muy agustito, oye. Que aunque me pongas las cosas difíciles, por un lado lo prefiero, así no me aburro y me entretengo en eso de intentar enamorarte. Y qué coño, que prefiero lo difícil contigo a lo fácil sin tí. En vedad exagero, no eres tan difícil, síolo aparentas serlo. Pero bueno, como ya nos vamos conociendo, te sigo el juego. Y si tú te haces el duro, yo me hago la orgullosa. Y si tú eres el ratón, yo soy el gato. Y si tú eres el lobo, yo caperucita. Y así se me pasan los días, queriéndote.

- Y que por mucho que me queje porque siempre es todo lo mismo, de toda mi rutiona, eres mi parte favorita.

jueves, 1 de marzo de 2012

Porque la quiero y no puedo hacerla feliz.

B: Cada vez que intento pasar página estas ahí, como si…
C: ¿Cómo si qué?
B: Como si quisieras que fue tan desgraciada como tú.
C: Yo jamás desearía eso. Quiero que seas muy feliz.
B: Pues entonces busca en el fondo de tu alma y dime si lo que sientes por mi es real o un juego nada más. Si es real saldremos adelante los dos juntos pero si no, por favor, déjame marchar…
C: Solo es un juego y no me gusta perder, eres libre

S: ¿Chuck por qué has hecho eso?
C: Porque la quiero y no puedo hacerla feliz.

¿Sabes qué te pasa conmigo? ¿No? Te lo voy a decir. Te acojona, te da pánico volver a querer a alguien, tienes miedo de volver a sentir algo tan fuerte como lo que una vez llegaste a sentir. Pasas de enamorarte porque lo que menos quieres es que te vuelvan a joder como ya lo hizo ella. Por eso actúas así conmigo. Pero no puedes evitarlo, porque te pongo, porque aunque no quieras sentir, tu corazón cada día te habla más de mí. Y tu erre que erre. Cuando parece que estamos a un paso de conseguirlo pasa algo que hace que volvamos diez pasos atrás. Y así estamos. Avanzando y retrocediendo. Llevamos 8 meses yendo y viniendo y al final siempre nos quedamos en el mismo sitio. Que si sí que si no. Y tú no te aclaras. Porque lo quieres todo. Me quieres a mí pero sin estar conmigo. Y las cosas no funcionan así. Que yo paso de los "ni contigo ni sin ti" sabes? porque yo lo quiero todo contigo y nada sin ti. Y lo único que consigues es marearme. Arriésgate cojones! Que sí, que lo más sencillo es tomar siempre el camino fácil. El de volverte un cabrón y buscar los besos de mil bocas distintas por los bares. El de tontear con todas y no sentir nada por ninguna. Pero a ti eso ya no te vale, porque aunque no me lo digas sé lo que hay. Y aunque a veces me hagas daño con tu pasotismo y con tus idas y tus vueltas, cada vez me vas necesitando un poquito más. Por mucho que te empeñes hay cosas que no se pueden evitar y tú, aunque sé que te gustaría, no vas a poder evitar quererme. ¿Sabes cuál es el problema? Que yo no voy a estar toda la vida esperándote, no porque no quiera, porque yo me muero por estar contigo, pero todos tenemos un límite y el mío no se si andará cerca o estará a años luz de rozarme el corazón. Así que yo que tú no tardaría mucho en decidir. Porque tienes que decidir. Los dos sabemos que no podemos estar mucho más así, estando pero sin estar. Si no me quieres contigo dilo. Cuanto antes mejor. Y si quieres, aunque dudes y tengas miedo, arriésgate. Porque tienes muchísimo que ganar y muy poco que perder. 
Tú eliges.

viernes, 17 de febrero de 2012

Te he esperado de muchas maneras, esperé como Penélope esperaba a Ulises, Romeo esperaba a Julieta y Beatriz esperaba a Dante para rescatarla.

Me he llenado de tus recuerdos, de los momentos que pasamos juntos, de los países que hemos visitado, de nuestras alegrías, de nuestras peleas... Entonces, mire hacia atrás, hacia el camino que mis pasos habían dejado, y no te vi.


lunes, 6 de febrero de 2012

Es curioso cómo siempre consigue arrancarme una sonrisa.



No puedo evitarlo, se me dibuja en la cara sola. Y mejor todavía, me ilumina el corazón. Hay sonrisas falsas, que sólo manipulan el rostro. Pero no consiguen engañar a nadie, la sonrisa de verdad no se ve en los labios. Se ve en los ojos, que brillan de repente. Es extraño; por muy mal que vayan las cosas, por mucho empeño que ponga yo en estar enfadada o triste, siempre aparece esa sonrisa. Siempre aparece esa persona que consigue arrancármela. Que consigue robármela. Y hacía mucho que no sonreía de esta manera. Hacía mucho que los motivos para estar seria eran mucho más fuertes, hacía mucho que nadie conseguía derribar mi protección a prueba de robos. Y ahora ya no estoy segura de si ha vuelto la sonrisa o me la han robado. La cuestión es que me gusta sentir esa luz en mis ojos. Me gusta sentir el corazón brincando en el pecho. Me gusta sentir el aleteo de mi alma. Y me gusta sentir que vuelve a haber un siempre. Aunque para mí el siempre no sea más que un continuo por ahora. Pero hay que ver cómo me gusta este por ahora. Cómo me gusta mi sonrisa.
 
Y la tuya.

viernes, 3 de febrero de 2012

Buenos días, mundo.

¿Me haces un regalo hoy? Me gustaría levantarme de la cama y encontrarme una rosa. Roja no. Blanca. Pura. Para escribir en ella como si fuese una página nueva. Una rosa dejada por alguien que piensa en mi y a quien todavia no conozco. Lo sé. Un contrasentido. Pero me haría sonreir. La cogería y me la llevaría al instituto. La dejaría apoyada en el pupitre, sin más, sin decir nada. (...) La dejaría alli toda la mañana. Después, a última hora, arrancaría uno a uno los pétalos y, con un rotulador azul, escribiría letra a letra, una sola en cada pétalo, la frase de aquella canción tan bonita: " Entre los obstáculos del corazón hay un principio de alegría que me gustaría merecer...", y después tiraría los pétalos por la ventana. El viento se los llevaría. Podía ser que alguien los encontrase. que volviese a ponerlas en orden. Que leyese la frase. Y que me viniese a buscar. 
Él quizá. Ya. Pero ¿quién es él?.

miércoles, 1 de febrero de 2012

Jack Kerouac.



"Pero entonces bailaban por las calles como peonzas enloquecidas, y yo vacilaba tras ellos como he estado haciendo toda mi vida, mientras sigo a la gente que me interesa, porque la única gente que me interesa es la que está loca, la gente que está loca por vivir, loca por hablar, loca por salvarse, con ganas de todo al mismo tiempo, la gente que nunca bosteza ni habla de lugares comunes, sino que arde, arde como fabulosos cohetes amarillos explotando igual que arañas entre las estrellas".